En el pleno de esta mañana se decidió por 9 votos en contra y 8 a favor que no se iban a expropiar las 17.5 hectáreas que rodean lo que fue el campamento del Ala II Flavia de caballería en Rosinos de Vidriales. La proposición no de ley presentada por el PSOE buscaba preservar parte del campamento de mayores dimensiones para su protección y estudio, así como para su puesta en valor como recurso turístico.
Petavonium fue inicialmente un campamento de la Legio X según las inscripciones halladas en el entorno. Ese campamento alojaría a una legión y se estima que tiene una extensión de unas 17 hectáreas. Sin embargo se ha especulado con la posibilidad de que la superficie total con restos arqueológicos de esa época alcance las 90 hectáreas.
Actualmente se pueden visitar los restos parciales de otro campamento menor, de 4,5 hectáreas que corresponde al Ala II Flavia, que era una unidad auxiliar que se estableció en el territorio con posterioridad.
Los terrenos se encuentran actualmente en régimen de explotación agraria con el consiguiente peligro para los restos arqueológicos. También se han excavado en algunos sectores. Hace dos años se intervino para investigar unas termas del vicus civil que se desarrolló en torno al asentamiento. La colaboración de los vecinos, que habían identificado un lugar exento de trabajos agrícolas y rodeado de maleza en el que aparecían grandes sillares de piedras propició la prospección del terreno y la intervención en un cuadrante de 36 metros en el que se confirmó la existencia de los baños.
Queda la duda de si se trata de unas termas privadas o son las que debieron existir según el epígrafe hallado en la zona y que recoge la construcción de unos baños por encargo de L. Versenus Aper, un prefecto del Ala II que cumple un voto a la diosa fortuna. Estarían datados entre el 160 y el 180 d.C. Estos restos se podrían hacer visitables en el futuro en la zona expropiada.
La mansio que se origina en el siglo I d.C. aparece recogida en el Itinerario de Antonino al pie de la vía XVII.
La zona además está situada al pie de un castro astur prerromano, el de San Pedro de la Viña (lo véis al fondo en la foto), con dataciones de la II Edad del Hierro. El conjunto ofrece al visitante una oportunidad única de conocer el proceso de romanización del sur del Conventus Asturum, y sobre todo de poner los pies en un auténtico campamento militar romano que por fortuna no ha sido ocupado por poblaciones posteriores, como ocurre en el de Castra Legionis (León), o en Asturica (Astorga).
El coste de la operación apenas llegaba a los 65.000€, diez veces menos de lo que se gasta la Junta en folletos de promoción del patrimonio, como le recordaron a la representante del Partido Popular que tuvo en sus manos la aprobación de la propuesta.
