fitoria3
fitoria3
Actualizado: 19 diciembre, 2022

Hace tiempo os hablé de algunos de los castros del Naranco, que están en serio peligro de desaparecer debido a la acción humana. Hoy me acerqué a uno de ellos, el de Fitoria, que cualquiera puede ver si se da un paseo por la pista finlandesa ubicada en la falda del monte.

En realidad poco vas a ver si te acercas, porque este castro está amenazado desde hace décadas por la acción humana, ya que está edificado dentro del perímetro del mismo, y las defensas que viera en los años 60 José Manuel González, ya no son visibles, o casi no lo son.

La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum
La cogolla de Fitoria. Septiembre 2022

Datos técnicos del castro e interpretación

Aún así, con un poco de esfuerzo no resulta difícil adivinar cómo era este espolón de caliza situado a 345 metros de altitud. Como digo, está situado en la parroquia de Fitoria, en Oviedo. Tiene una extensión aproximada de 60m de largo por 20 de ancho, y como os podéis imaginar no debió albergar a una gran población en su interior. La parte superior ha sido aterrazada, así como un par de sectores más bajos, en los que se puede ver aún los restos de un muro de contención que parece moderno, para evitar el derrumbe de los taludes.

Jose Manuel González todavía pudo ver un foso1 que rodeaba al lugar por el este y el oeste, pero hoy en día, entre lo que se ha colmatado para la construcción de viviendas y agricultura, así como la torre de alta tensión que corona la cima del espolón, no queda nada.

Te puede interesar   La etapa final de la cultura astur. Lo indígena bajo el dominio de Roma
La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum
La cogolla de Fitoria. Septiembre 2022

Por su reducido tamaño, y por el descubrimiento en las inmediaciones del lugar de teja romana y monedas de plata de época imperial, se ha supuesto que se trata de una fortificación romana2 que vigilaría la vía que comunicaba con Lucus Asturum y que rodearía el monte Naranco por el este.

El modelo LiDAR

Tras la visita preparé este modelo sobre los datos del asentamiento disponibles en el Instituto Geográfico Nacional. En la primera imagen se ve realmente poco debido a dos cosas. La primera que está totalmente antropizado, como os decía, y la segunda que tiene una marcada pendiente que nos confunde a la hora de determinar la extensión habitable del mismo.

Se percibe quizá un sistema de fosos o taludes, que conecta directamente con el camino que se desgaja de la calle que sube por la izquierda. Quizá se tratara de un camino antiguo que atravesaba la zona y que pudo aprovechar el corte de la ladera. En ese punto comienza la parte llana de la cumbre.

La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum

Sin embargo, si generamos una vista 3D y la rotamos un poco en dirección oeste, se aprecia perfectamente la forma del espolón, y se comprende por qué es un buen lugar donde establecer un punto de vigilancia. El camino que discurre por debajo del asentamiento, que se ve en el modelo cenital, es una vieja vía que tiene toda la pinta de haber sido utilizada tiempo atrás. Mantiene una altura relativa sobre el valle entre Oviedo y el Naranco y no tiene una pendiente excesiva. En él se ubica el manantial del que os hablo al final.

Te puede interesar   Recuperados 16 morteros de la explotación minera romana de El Figo, en Tapia de Casariego
La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum

En este modelo he difuminado un poco el fondo, que corresponde con la pendiente que sube hacia la cima del Naranco. En él se aprecia mejor la altura relativa sobre el entorno. Se ve la vía inferior, que puede tratarse, como os digo arriba de un camino muy antiguo, teniendo en cuenta la ubicación de este sitio. En la cima se percibe perfectamente la forma aterrazada, e incluso puede que estemos viendo un foso perimetral, o un rebaje en la piedra para aumentar la defensa rodeando la cima.

En este modelo no se ve continuidad del camino de acceso que veíamos más arriba por la parte izquierda, quizá se trate de la entrada tradicional al lugar, puede que incluso la de la fortificación. En esta vista estamos mirando hacia el oeste.

Un lugar abandonado

Los años de acción antrópica no han pasado en balde, y hoy en día apenas hay algo que ver, pero sinceramente, creo que el mayor peligro que lo acecha es el abandono. Tuve la oportunidad de charlar con unos vecinos de la zona y me decían que la gente mayor ya no puede hacerse cargo de la limpieza de los prados, como hacía antes. Además no hay tampoco necesidad de mantener limpio el campo para el ganado porque ya no lo hay simplemente. Los jabalís campan a sus anchas por la zona y poco a poco los árboles y la maleza se comen el terreno que antes eran prados abiertos. El hecho de estar en su mayor parte en zonas de propiedad privada tampoco ayuda a su conservación por parte del Principado.

Te puede interesar   Flavionavia, la ciudad pésica más importante en época romana
La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum
La cogolla de Fitoria. Septiembre 2022

Parece que el Plan de Castros del Principado de Asturias incluye alguna recomendación de intervenir en estos yacimientos, pero de momento no hay noticias de que se vaya a hacer nada en ellos.

Un potencial conjunto histórico

El lugar es de un alto interés. El asentamiento fortificado podría limpiarse y señalizarse, no se si hablar de compensaciones económicas por la compra de los terrenos a los propietarios sería mucho decir. Además a los pies de la fortaleza se encuentra la conocida como fuente del sapo. Es un lugar de una antigüedad notable ya que se trata de uno de los dos manantiales que abastecía a la población de Oviedo (a través de la canalización de agua que bajaba a la ciudad desde el Naranco) y consta su construcción en el año 1500.

Tuvo varias transformaciones a lo largo de los siglos, y se pueden ver todavía varias inscripciones de las que os dejo información en este enlace. El lugar fue restaurado en los años 90. Es muy reconocible por el puente metálico que discurre sobre él y que marca el final de la pista finlandesa en Fitoria.

Imaginaros que se pudiera reconocer el castro (fortificación romana) que hay a escasos metros de la zona.

La cogolla de Fitoria. Vigilando la ruta hacia Lucus Asturum

Notas al pie y bibliografía

  1. GONZÁLEZ Y FERNÁNDEZ-VALLES, J. M. (1976), Miscelánea Histórica Asturiana. Oviedo. pp.115
  2. FANJUL PERAZA, A.(2004) Los Castros de Asturias, una revisión territorial y funcional. Ayuntamiento de Teverga. pp. 133

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí