Es un tema con un título muy rimbombante pero que es muy sencillo de entender, como vais a ver a continuación. Esta teoría, que ya fue elaborada en los años 70 (y renovada en 2012) por Carneiro1, viene a decir que una población (normalmente en crecimiento) que compite por los recursos limitados del entorno con otras poblaciones, acaba desarrollando un modelo social donde hay jerarquías. Se ha utilizado este razonamiento como justificación del desarrollo de este tipo de sociedades entre los pueblos prerromanos del noroeste.
Ya os he contado en varias ocasiones que actualmente hay dos teorías en discusión: la primera que dice que hay sociedades jerarquizadas en los castros del noroeste (astures y galaicos) y la que dice que son sociedades igualitarias, al menos en un cierto grado ya que en este entorno habría que incluir las de los grandes poblados del sur del territorio donde parece adivinarse una jerarquización más clara que en los pequeños castros.
Desde este punto de partida, el investigador de la Universidad de Cambridge, Santiago Tunas-Corzón2, ha planteado en el CAA 2025. Digital Horizons celebrado en Grecia hace unos días, que la teoría de la circunscripción no se ha puesto a prueba arqueológicamente en el noroeste y se ha puesto manos a la obra para ver si es válida o no en este entorno.
Para ello ha empleado técnicas de análisis del paisaje recientes como LiDAR, utilizando software de análisis (QGIS) que permite elaborar modelos predictivos de zonas de cultivo aprovechables, áreas de movilidad en torno a los castros, etc… Para ello elaboró un sistema que se basaba en el análisis de costes. Esto quiere decir que tomó como territorio del castro aquel en el que «compensaba» el coste de explotación con el rendimiento obtenido dicho muy llanamente.
Según esta investigación, a pesar de que en el área de estudio (castros gallegos) hay contabilizados al menos 2500 asentamientos, el modelo resultante dice que cabría la posibilidad de duplicar prácticamente el número de ellos sin que las poblaciones llegaran al conflicto.
En conclusión, habría recursos para todos, por tanto la teoría de la circunscripción no sería válida para explicar la desigualdad social en este tipo de poblamiento si es que la hay, y el modelo de sociedad igualitaria sería más útil para explicar la sociedad prerromana de estas tribus.
Como siempre, hay matices que añadir a esta teoría (en mi opinión) así que es previsible una réplica por parte de investigadores que opinan de forma contraria. Ojo, lo que os enlazo es sólo el «abstract» de una conferencia, no el desarrollo de la teoría en sí, por lo que hay que tomar lo que digo, con toda la cautela posible
Por ejemplo, se da por hecho que sólo hay castros en este territorio, es decir, no se contempla la existencia de granjas, brañas, etc… que complementarían el paisaje productivo y humano del territorio. De hecho, ya os comenté que están empezando a aparecer. Esta suposición limita al propio modelo empleado por el autor, ya que, por ejemplo, uno de los costes es el de desplazamiento desde el poblado hasta la periferia de su territorio, mientras que si hay una granja, el espacio posible de explotación se multiplica.
Siguiendo con este razonamiento, este modelo en el que parecen encajar castros de distinto tamaño e importancia dentro del territorio, daría como resultado un paisaje jerarquizado (por ejemplo la Campa Torres respecto a núcleos vecinos de menor entidad) y en ese contexto es más que posible que existan distintos estatus sociales. De hecho es en estos castros principales de las zonas, a priori igualitarias, donde aparecen evidencias de élites en esa sociedad, de nuevo la Campa Torres o Llagú.
Tampoco se tienen dataciones absolutas de todos estos castros por lo que no es posible saber si todos forman parte del mismo momento (aunque esto, precisamente, favorecería la teoría de que hay recursos para todos).
Por otro lado, el autor reconoce que la refutación de la teoría de la circunscripción por sí misma tampoco es válida para rechazar la jerarquización, pero al menos establece un marco de estudio y añade un matiz a la idea de que «inevitablemente» las sociedades de época prerromana tienen que tender hacia la jerarquización, lo que es verdaderamente interesante ya que es necesario encontrar otros modelos que lo expliquen.
Como veis, el estudio de nuestro pasado protohistórico está muy vivo y se están haciendo análisis cada vez más interesantes a la luz de las nuevas tecnologías y medios de los que disponen los investigadores.
Bibliografía
- Carneiro, R. L. (2012). The circumscription theory: a clarification, amplification, and reformulation. Social Evolution and History, 11(2), 5-30.History 11(2): 5–30. ↩︎
- Tunas-Corzon, S.(2025). Assessing circumscription in the castro landscapes: a cost-based site catchment analysis of Iron Age hillforts in north-western Iberia. DIGITAL HORIZONS, 778. ↩︎
