
De nuevo acudimos ilusionados a las jornadas de visita de la villa romana de San Martín de la Estaca, y esta vez, más si cabe, salimos convencidos de la importancia de este enclave arqueológico para nuestra Historia.
Las intervenciones de esta campaña, financiadas esta vez sólo con recaudación de fondos de particulares por la Asociación de Amigos del Mosaico de la Estaca, y por tanto, ninguna aportación de las administraciones públicas ni locales y regionales, ha constatado que la gran villa (unos 700 metros cuadrados de planta) fue un centro de producción agrícola que puede aportarnos información esencial para uno de los periodos de nuestra historia que permanecen más ocultos para el conocimiento, es decir, el final del mundo romano y el comienzo del medieval. Los siglos oscuros llamados tardoantigüedad.

La excavación ha dejado al descubierto parte de unas estructuras pertenecientes a las edificaciones destinadas a la clase servil de la villa. Un trabajo que ha permitido constatar la presencia de los patios en torno a los que se distribuían las viviendas, así como diversas fases de edificación de la misma.
También se ha excavado un edificio, exento, que puede tener una función tipo hórreo, que pertenece a la misma época que las otras edificaciones y que presenta aspectos muy interesantes de reutilización o reforma posterior que van a ser estudiados en nuevas campañas.

Ojalá para la próxima campaña se obtenga la financiación necesaria para continuar con las investigaciones en este lugar. Es sin duda necesario que destinemos parte del presupuesto de nuestras administraciones públicas a conocer nuestra historia.
