brazaletes Astorga 1
brazaletes Astorga 1

En 1935 Hugo Obermaier publicaba1 la aparición de este brazalete, que pertenecía a un conjunto mayor que «desapareció para la ciencia», un eufemismo que viene a significar que se vendió en el mercado negro.

Se trata de una pieza interesante, que se atribuye al Bronce Final y que formaría parte de ese escaso conjunto de piezas de adorno personal que nos han llegado de ese periodo. Está incluida en el Inventario de Bienes arqueológicos del Concejo de Candamo desde 2013. Sin embargo nunca la he visto, y creo que no forma parte de la colección del Museo Arqueológico de Asturias 2.

El hallazgo

Obermaier cuenta como meses antes de la publicación (diciembre de 1935) D. José Fernández Menéndez, le había entregado una pulsera que formaba parte de un conjunto de 12, de las que el resto no tenía noticia. Su lugar de procedencia era el Prado de los Llanos de Miguel, en Llamero, a unos pocos kilómetros de Grullos, la capital del concejo de Candamo, en Asturias.

Aparecieron tras una voladura de una gran roca, estaban en un hueco en la piedra. No se encontraron huesos humanos ni estructuras que constituyeran indicios de uso funerario.

Piezas sueltas: Los brazaletes de Llamero, Candamo
Brazalete de Cabañaquinta (a) y Llamero (b) (De Blas Cortina)

El brazalete

las medidas son 77mm de diámetro, peso 90 gramos. Tiene una decoración geométrica de finas rayas. Lo describe así:

«…finamente grabada con rombos que alternan entre haces de líneas en aspa, y los extremos llevan verticales rellenas de rayitas horizontales»

Piezas sueltas: Los brazaletes de Llamero, Candamo
Brazalete de Llamero. Dibujo de 1935

Se trata de una pieza de sección plano convexa, donde la decoración aparece en su cara exterior. De Blas Cortina lo añade al conjunto de piezas que recuerdan a los pequeños lingotes de bronce del continente.

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De Blas Cortina dedica un pequeño capítulo a este brazalete en el que determina su antigüedad por paralelismo con otras piezas de Galicia y del centro norte de Europa entre los siglos IX y VI a.C.3

Un ocultamiento del Bronce Final

El conjunto de brazaletes provenía de un ocultamiento. Desde el principio se descartó un depósito funerario. Ya os conté que el depósito de objetos de bronce tiene como objeto estrella el hacha de bronce. Tenemos ejemplos descubiertos hace muy poco. Precisamente los brazaletes y otros objetos de este metal son la excepción, pero existen paralelismos.

En Asturias hay otro conjunto que fue muy conocido y que se documentó en Cabañaquinta, Aller4.

Por ejemplo en Astorga se documentaron estos ejemplares, que se parecen formalmente al del conjunto de Llamero 5.

Piezas sueltas: Los brazaletes de Llamero, Candamo
Brazaletes de Astorga. Museo de León, los más parecidos al de Llamero

En la submeseta norte son más frecuentes, y aparecen en diversos conjuntos que están documentados desde el siglo XIX hasta la actualidad. Por ejemplo estos de Sopeña en Valladolid 6.

Finalmente, en Coaña también hay documentado un brazalete de bronce, que se considera heredero de la técnica de fundición del Bronce Final pero aparece en un ámbito castreño, lo que nos habla de la larga pervivencia de estos objetos, cuya adscripción a un periodo histórico concreto debe hacerse con mucha precaución:

Piezas sueltas: Los brazaletes de Llamero, Candamo
Brazalete de Bronce procedente del Castro de Coaña. Museo arqueológico de Asturias

O este procedente del Castro de Chano, en el Museo de León. Fijaos que ambos tienen sección circular frente a los plano-convexos del Bronce Final.

Piezas sueltas: Los brazaletes de Llamero, Candamo
Brazalete de bronce procedente del castro de Chano. Museo de León

Significado de estos objetos

Los brazaletes de bronce han sido considerados un objeto cotidiano cuyo significado va más allá de un simple adorno personal. Tenemos referencias en las fuentes clásicas sobre el uso por parte de determinados pueblos de la Península de brazaletes de este tipo en la Edad del Hierro que se denominaban viriles o virios 7. El nombre hace referencia al género masculino, y aparece también en la onomástica de celtíberos, astures y otros pueblos del noroeste. Se trataría de objetos de tienen un valor económico como reservas de metal, además de su funcionalidad estética.

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La mención de estos objetos en dos periodos distintos nos habla probablemente de la larga pervivencia de los mismos en el uso de las comunidades prerromanas de la Península.


Notas al pie y bibliografía

  1. Obermaier, H. (1935). Brazalete de la Edad del Bronce hallado en Asturias. en Sociedad Española de Antropología, etnografía y Prehistoria. Actas y memorias. Tomo XIV. Madrid. pp:261-262
  2. Díaz García, F., & Martínez Faedo, L. (1999). Carta arqueológica del concejo de Candamo. Excavaciones arqueológicas en Asturias 1995-98.
  3. BLAS CORTINA, Miguel Ángel de, et al. La prehistoria reciente en Asturias. Consejería de Educación y Cultura del Principado de Asturias, 1983.
  4. Sierra Piedra, G., & Díaz Nosty, B. (1999). Carta arqueológica del concejo de Aller. Excavaciones arqueológicas en Asturias 1995-98.
  5. Manzano, J. F. (1981). Dos brazaletes de la Edad de Bronce procedentes de los alrededores de Astorga. Numantia: Arqueología en Castilla y León, (1), 181-184.
  6. Delibes de Castro, G., Escudero Navarro, Z., & Montero Ruiz, I. (2020). Hallazgo de dos brazaletes de la Edad del Bronce en 1832, durante las obras del Canal de Castilla a su paso por Cigales (Valladolid).
  7. Cuevillas, F. L. (1932). Los brazaletes posthállstátticos del noroeste hispánico. Archivo Español de Arte y Arqueología8(24), 225.

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