Uno de los objetos más característicos de la metalurgia de la Edad del Hierro en la península ibérica es esta fíbula cuyo nombre ya lo dice todo como es fácil de advertir. Su forma, y su denominación geográfica responden a un modelo de fíbula que, a pesar de que su origen estaría en las fíbulas anulares de centro Europa del siglo VI y V a.C., se expande a la península y ahí adquiere su carácter definitivo.
Entre los astures hay varios ejemplos de su utilización, muy probablemente por influencia del mundo vacceo.

Concretamente esta pieza es casi con toda seguridad vadiniense. Hay algunas piezas muy similares en la necrópolis de Paredes de Nava, la posible Intercatia vaccea. Apareció en Ponga a comienzos del siglo pasado y se conservaba tan bien que incluso la aguja aún era funcional como se puede ver en esta otra foto del catálogo de las Edades de los Metales del Museo arqueológico de Asturias, hecha hace unas décadas.

La pieza se puede ver en la exposición permanente, planta segunda, dedicada a la cultura de los castros y Roma.