Se trata del zócalo de piedra que perimetra una edificación típica de la 2ª edad del Hierro astur. En la imagen de esta noticia se ve la cara interior de la estructura. Según la información publicada en prensa, el diámetro de esta edificación es de 3,7 metros cuadrados aproximadamente y se han recuperado 34 cm de alzada.
La superficie interior de esta construcción no sobrepasaría los 11 metros cuadrados por lo que parece de unas dimensiones demasiado reducidas como para ser una vivienda, pero los tamaños de las construcciones castreñas son muy variables. No obstante podría tratarse también de un edificio auxiliar.
Lo cierto es que todo en este castro parece de tamaño reducido excepto el sistema defensivo, que aparenta ser desproporcionado para el espacio realmente habitable. Posiblemente la erosión marina se haya llevado la parte del castro más expuesta, pero confirma que estas fortalezas costeras eran verdaderos fortines colgados de los acantilados.
¿Qué dinámicas sociales llevarían a construir esos fosos y muros tan fuertes?

En cualquier caso, la idea es excavarla al completo en futuras campañas así que estaremos atentos a los resultados de las mismas.


