La fotografía corresponde a uno de los pozos de la Campa Torres. Bajo el subsuelo del gran castro astur transmontano la roca que compone el cabo favorece la formación de un nivel de arcillas que se empapan de aguas procedentes de la filtración de lluvia al subsuelo. Los habitantes de la Campa perforaron la superficie hasta alcanzar el nivel freático y crear estas infraestructuras para abastecerse de agua tanto para consumo humano como para otras labores.
Estos pozos, sin duda ya existían en época astur pero fueron reformados y algunos de ellos abiertos en época romana justo en el momento de mayor actividad «industrial» metalúrgica del mismo1. En ocasiones aparecen asociados a edificaciones que podrían ser talleres.
Bibliografía
- Granda, A. M., & Hidalgo, E. S. (2009). Informe de la excavación de cuatro sondeos arqueológicos en el exterior del pozo de agua nº 1 del castro de la Campa Torres (Gijón). In Excavaciones arqueológicas en Asturias 2003-2006 (pp. 275-281). Gobierno del Principado de Asturias. ↩︎
