Noticia del descubrimiento de una posible lúnula romana o medieval

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La representación del creciente lunar ha sido, sin duda, uno de los motivos más empleados en el ámbito de la religión, superstición y de los amuletos protectores. El objeto del que os hablo podría formar parte de un grupo de piezas tuvo una extraordinaria amplitud temporal de utilización en la península ibérica entre el periodo romano y medieval sin apenas cambios en su morfología.

Xandru González, su descubridor, me hacía llegar unas fotografías de un objeto encontrado en su propiedad mientras hacía unos trabajos de restauración de uno de los caminos. Se trataba de una pieza de bronce fundido con forma de creciente lunar apuntando hacia abajo. Uno de los extremos estaba roto. En la parte central presenta dos apéndices perforados que servirían para unir  la pieza a su soporte. Las medidas aproximadas del objeto no sobrepasan los 5 cm de anchura y altura y los cuernos rondan los 9 milímetros en su parte más ancha. Apenas tiene 4 milímetros de espesor en esa parte, adelgazando a medida que nos aproximamos a su extremo hasta los 2 mm.

La pieza no estaba a más de “un palmo” de profundidad y apareció en un contexto en el que habitualmente aparecen galbos de cerámica tanto contemporánea como medieval durante las tareas agrícolas, algo habitual en una zona que formó parte del conjunto de casas de “colonos” del palacio de Puerma, en Les Regueres. Todo el entorno está completamente revuelto tras siglos de tareas agrícolas. Actualmente la zona es una huerta en torno a una cuadra y un gallinero de la casa. 

Lunuluae descubierta en les Regueres durante el transcurso de unas tareas agrícolas.
Posible lunulae descubierta en les Regueres durante el transcurso de unas tareas agrícolas.

La luna ha sido motivo de representación en todas las sociedades de la Antigüedad. Símbolo de fertilidad, pero también de oscuridad, su influjo ha tenido una relevancia en la vida cotidiana de agricultores y ganaderos desde el Neolítico. La manera en la que se representa refleja distintas propiedades, tanto positivas como negativas y si cuando está llena representa la fertilidad, habitualmente cuando está en fase creciente, representada con los cuernos, es un amuleto protector contra el mal de ojo1.

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Las lunulae alcanzaron una difusión extraordinaria durante todo el Imperio. Por la morfología de la pieza presentada es posible determinar que no forma parte del adorno personal (habitualmente tienen sólo un agujero para suspenderlo del cuello y los cuernos se representan tanto hacia arriba como hacia abajo). Casi con total seguridad está destinado a la protección de un animal, probablemente un caballo2. Los amuletos que se destinan a animales presentan dos agujeros de sujeción y los cuernos siempre apuntan hacia abajo. 

En la guarnición del caballo romano ya encontramos piezas de este tipo. El origen de este equipamiento se relaciona con modelos adaptados de la caballería céltica y en la escultura romana aparecen representadas con frecuencia este tipo de lúnulas con una amplia variedad de formas. Una de las más habituales es sujeta a los correajes de la grupa donde aparecen también representados en códices de época medieval como el Beato de Liébana.  

Lúnula de época romana descubierta en Mérida, con medidas aproximadas a las de la encontrada en Asturias.
Lúnula de época romana descubierta en Mérida, con medidas aproximadas a las de la encontrada en Asturias.

La sencillez en la decoración del objeto presentado contrasta con formas más complejas que se utilizan en la Edad Media, donde los llamados “pinjantes” aparecen unidos a estrellas y otras formas. La pieza con un mayor parecido formal la encontramos con una lúnula depositada en el Museo de Arte Romano de Mérida con número de inventario CE29272. Esta lúnula, completa, apareció en el contexto de unas excavaciones en el nivel romano de la ciudad y entró en el museo en 1947. La identidad formal de ambos objetos añade dudas sobre la antigüedad de la pieza documentada en Asturias.

La notificamos a Patrimonio para su evaluación.

Bibliografía

  1. Barrera Antón, J. L. y Nogales Basarrate, T. (2001)  El «Ojo de la noche»: el culto a la luna y el «Mal de Ojo» de la antigüedad hasta nuestros días. Magia y religión de la antigüedad a nuestros días. Mérida: Museo Nacional de Arte Romano. Cuadernos Emeritenses, pp. 115-138  ↩︎
  2. Martín Ansón, M. L.  (2005). Amuletos-talismanes para caballos, en forma de creciente, en la España medieval. Archivo español de arte, 78(309), 5-21. ↩︎
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Alfonso Sánchez
Alfonso Sánchezhttps://astures.es/proyecto/
Me apasiona la historia de Asturias y los astures en todas sus facetas. Pateando museos y yacimientos. Excavando cuando puedo y divulgando como mejor sé.

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